EL 9 de julio, en Capital y el Gran Buenos Aires, la caída de la nieve fue el acontecimiento que sobrepasó a la celebración de la fiesta patria, pero ¿cómo viven?, ¿cómo es el clima? en la Base permanente Esperanza, que está ubicada en el helado y lejano Continente Antártico.
"Los vientos soplan a veces, hasta 220 kilómetros por hora y la sensación térmica ha llegado a 105 grados bajo cero. Así, son los días en este lugar donde Dios está no sólo está cuando uno sale de la Base sino en todo momento”, expresó su jefe, el mayor del Ejército Sergio Fabián Pietrafesa(42), quien vive con su esposa María Elena y sus hijas Natalia (20), Belén (18) y Milagros (7). Llegaron el 12 de diciembre de 1978, con la primera dotación de familias en la Antártida.
En esas tierras blancas , habitan 62 personas,12 familias, 22 niños y 10 mujeres. Las casas están construidas con fibra de vidrio, son muy resistentes y poseen la misma comodidad que las del Continente: tres habitaciones, baño, cocina living comedor y calefacción.
En el verano se realizaron distintos proyectos de investigación, como el estudio de aves Skuas y pingüinos, limnología, sismografía, mareología y energía alternativa, con la participación de más de 10 científicos.
Sin embargo, Pietrafesa y su gente poco tiempo tienen para descansar.”Hoy tuvimos que trasladar personas hasta el lugar de mantenimiento de una aeronave que se encontraba a 8 kilómetros, por caminos un tanto complicados por la dificultad que estos presentan para el desplazamiento de las motos de nieve. Lamentablemente el glaciar tenía poca nieve, es decir que está el hielo pelado y las motos no tienen el agarre suficiente.Estuvimos todo el día afuera y recién llegué a mi casa", contó el oficial, a través del chat que comenzó a las 22.
Cuando se le consultó sobre un posible problema de logística por la ausencia del rompehielos Almirante Irízar,-en reparaciones luego del incendió- afirmó que no afectará la actividad de la Base, porque tienen “absolutamente todo lo necesario para más de un año”.
En el transcurso de la conversación, en el avatar-recuadro derecho- de la pantalla del MSN aparecían lentamente algunas fotografías, ante la imposibilidad de verlas con claridad-en la Base sólo cuentan con 64 k de Internet-, se le pidió si podría describir como es el paisaje que lo rodeaba, y respondió:”Esto no se puede describir con pocas palabras, pero si no tuviera otra posibilidad, le diría:” IMPONENTE,y uno pasa a sentirse algo muy pequeño”.
Las dificultades técnicas pusieron fin a la entrevista, pero quienes deseen contactarse y conocer a los hombres que están trabajando en esas lejanas latitudes,lo pueden hacer al teléfono de la Base Esperanza:08102220770.
"Los vientos soplan a veces, hasta 220 kilómetros por hora y la sensación térmica ha llegado a 105 grados bajo cero. Así, son los días en este lugar donde Dios está no sólo está cuando uno sale de la Base sino en todo momento”, expresó su jefe, el mayor del Ejército Sergio Fabián Pietrafesa(42), quien vive con su esposa María Elena y sus hijas Natalia (20), Belén (18) y Milagros (7). Llegaron el 12 de diciembre de 1978, con la primera dotación de familias en la Antártida.
En esas tierras blancas , habitan 62 personas,12 familias, 22 niños y 10 mujeres. Las casas están construidas con fibra de vidrio, son muy resistentes y poseen la misma comodidad que las del Continente: tres habitaciones, baño, cocina living comedor y calefacción.
En el verano se realizaron distintos proyectos de investigación, como el estudio de aves Skuas y pingüinos, limnología, sismografía, mareología y energía alternativa, con la participación de más de 10 científicos.
Sin embargo, Pietrafesa y su gente poco tiempo tienen para descansar.”Hoy tuvimos que trasladar personas hasta el lugar de mantenimiento de una aeronave que se encontraba a 8 kilómetros, por caminos un tanto complicados por la dificultad que estos presentan para el desplazamiento de las motos de nieve. Lamentablemente el glaciar tenía poca nieve, es decir que está el hielo pelado y las motos no tienen el agarre suficiente.Estuvimos todo el día afuera y recién llegué a mi casa", contó el oficial, a través del chat que comenzó a las 22.
Cuando se le consultó sobre un posible problema de logística por la ausencia del rompehielos Almirante Irízar,-en reparaciones luego del incendió- afirmó que no afectará la actividad de la Base, porque tienen “absolutamente todo lo necesario para más de un año”.
En el transcurso de la conversación, en el avatar-recuadro derecho- de la pantalla del MSN aparecían lentamente algunas fotografías, ante la imposibilidad de verlas con claridad-en la Base sólo cuentan con 64 k de Internet-, se le pidió si podría describir como es el paisaje que lo rodeaba, y respondió:”Esto no se puede describir con pocas palabras, pero si no tuviera otra posibilidad, le diría:” IMPONENTE,y uno pasa a sentirse algo muy pequeño”.
Las dificultades técnicas pusieron fin a la entrevista, pero quienes deseen contactarse y conocer a los hombres que están trabajando en esas lejanas latitudes,lo pueden hacer al teléfono de la Base Esperanza:08102220770.
Marisa Bisceglia
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